martes, 10 de enero de 2012

Energía. Un tubo produce electricidad con el calor de la tierra

Tiene dos metros de alto y produce electricidad con el calor de la tierra. Uno solo de estos aparatos produce suficiente energía para 18.000 Hogares. Hay países, como Chile, interesados en comprarlo. Utiliza un espacio mínimo, no contamina el ambiente y es silencioso. Curiosamente, su inventor no quiere venderlo. Aquí contamos qué es lo que ofrece



Texto: Javier Méndez Vedia / Fotos:Power Tube Energy

E l funcionamiento es sencillo. Dentro de un tubo de energía de metro y medio de diámetro y 50 de longitud hay dos gases que circulan. Al hacerlo mueven una turbina que produce electricidad.
Lo que mueve los gases es el calor de la tierra. La temperatura elevada los convierte en gases y ascienden hasta la punta del tubo. Mueven la turbina y descienden en forma líquida, hasta que el calor los regresa al estado gaseoso, lo que los lleva a ascender nuevamente.
Es lo más parecido que hay a la máquina de movimiento perpetuo que desde hace décadas imaginan los físicos. Pero esta máquina silenciosa no se mueve eternamente. Requiere de calor.
Uno de los gases, llamado isopentano, alcanza su punto de ebullición a pocos grados por encima de la temperatura ambiente. Hierve fácilmente de modo continuo y, en un día muy caliente, puede evaporarse. El segundo gas es el isobutano, que se utiliza en algunos aerosoles como sustituto de los dañinos CFC (clorofluorocarbonos), que afectan la capa de ozono. El isobutano es un gas ‘amigable’ con el medio ambiente. También se utiliza en muchos sistemas de refrigeración (heladeras y acondicionadores de aire).
Los equipos llegarán a Bolivia si es que existe una decisión efectiva, porque interés hay. El representante local de esta empresa, creada por el inventor del tubo, Doyle Brewington, ha empezado a contactarse con funcionarios del Gobierno central y departamental. También con algunos empresarios.
Fernando Landívar se enteró de que este equipo estaba ya en funcionamiento y decidió viajar a Estados Unidos. Consiguió la representación para Bolivia, un logro del que países como Japón aún no pueden presumir.
Cuenta el representante de la firma, José Alvarado, desde su oficina en Houston, que los japoneses invitaron al inventor a visitar el país. La intención era hacer negocios. Doyle Brewington escuchó con interés la propuesta de instalar fábricas en el país nipón, pero cuando supo que esa empresa era la misma que financiaba a los cazadores de ballenas, suspendió los acuerdos.

NADA DE VENDER
En esa actitud casi incomprensible para el mundo de los negocios que tiene Doyle Brewington hay que buscar la explicación para su decisión de no vender los tubos de energía. El negocio consistirá en un trato de riesgo compartido en el que la empresa instala el tubo gratuitamente y se limita solo a vender electricidad.
Cuando EXTRA lo contactó, José Alvarado estaba llegando a Houston desde Centroamérica y algunas islas del Caribe. Estaba contento porque el tubo ha sido certificado por una empresa que trabaja con la NASA (Administración Nacional de Aeronáutica y del Espacio). El proyecto fue declarado prioritario por la certificadora, por el inmenso potencial de generación de energía del tubo.

Para tener una idea de la ventaja de este artefacto, se puede visitar Puerto Rico. Ese país paga 29 centavos de dólar el kilovatio-hora, o lo que es lo mismo, $us 290 el megavatio-hora. Es la tarifa más cara de la zona caribeña. Con el tubo de poder se puede generar energía a un cuarto del costo de lo que paga actualmente ese país.
En Bolivia, tres cuartas partes de la electricidad que se utiliza depende del gas natural. Pagamos aproximadamente $us 43,83 por megavatio hora; mucho menos que Puerto Rico, pero aun así, Alvarado estima que se puede proveer de energía a un costo menor que el de cualquier hidroeléctrica.

Para llegar a producir los 476 megavatios que cada año consume Bolivia se tendrían que instalar 50 tubos de diez megavatios cada uno.
Si se trata de tener una idea de las necesidades de nuestro país, basta revisar la cantidad que recientemente ofreció vender Brasil. El ‘alivio inmediato’ que ofreció a Bolivia el colosal vecino consiste en 40 megavatios, para solucionar los problemas causados por los recientes apagones. Con diez de estos tubos se podría prescindir de la ayuda brasileña.
La instalación de los equipos no es complicada, según explica Alvarado. Primero se debe ubicar, vía satélite, los lugares más calientes de determinado territorio (ver infografía). El calor necesario puede estar a diferentes profundidades.

En la falda del volcán Pacaya, de Guatemala, por ejemplo, hay posibilidades de aprovechar el calor y generar 350 gigavatios, pero se instalarán tubos para obtener un solo gigavatio, que es la mitad de lo que requiere el país. Ahí basta perforar unos pocos metros para encontrar la fuente de calor necesaria. En otros lugares puede estar a 1.500 metros, o a 1.000 o quizá a unos pocos cientos. Son profundidades que se pueden alcanzar con relativa facilidad.

Cuando el pozo está hecho se requiere de 90 días para instalar el tubo. Todo el proceso cuesta alrededor de $us 1 millón.
Varios detalles llaman la atención del funcionamiento de este sistema. Uno de ellos es el silencio. El ruido que produce el power tube no espantaría a ningún pájaro. Además, el espacio que requiere no supera el de una caseta de diez por diez metros. Comparado con las termoeléctricas, que ocupan varias hectáreas, es casi irrisorio. La termoeléctrica requiere de ingentes cantidades de agua. Por un tubo se inyecta el agua y por otro se utiliza el vapor.

A los fabricantes del tubo les gusta destacar que no se utiliza energía no renovable y que solo es necesario un mantenimiento cada cinco años. El sistema se controla vía satélite y cuando llega el momento de la reparación solo se lo detiene durante tres días, para cambiar las partes móviles.
No produce ningún tipo de desecho, por lo que los acuíferos están, supuestamente, a salvo. En el caso de algún terremoto, el aparato no producirá ningún desecho peligroso para el ambiente, asegura el fabricante.

El año que acaba de empezar marca la producción en serie de estos tubos. Es posible instalar fábricas en varios países o algunas piezas específicas, siempre con asesoramiento técnico.
La fe de Alvarado en Brewington es inquebrantable. Al fin y al cabo, el científico es uno de los responsables del uso de las bacterias que pueden degradar el petróleo y ha creado un pavimento que jamás se agrieta. A fines de mes, el inventor estará en Bolivia.

Detalles de un invento que promete

- El inventor del power tube es el responsable de la utilización de los microorganismos que degradan los desechos petroleros.
- La compañía, Power Tube Energy ha patentado un software que funciona con tres satélites. Es posible determinar cuántos kilovatios se puede obtener con el calor de determinado lugar, aunque esté en el mar.
- Hay tubos de un megavatio, de cinco y de diez. Chile está interesado en instalar 40 tubos de abastecimiento para una vía férrea de 1.200 kilómetros, desde Iquique a Punta Arenas.
- Fue diseñado para funcionar en los anillos de fuego, que son las zonas más calientes del planeta. Hay 136 países en esos anillos. Funciona con la temperatura normal de la tierra.
- Un tubo de diez megavatios puede ahorrar 3,7 millones de litros de combustible. Evita depositar en la atmósfera 400 toneladas de polución.
- Empezó a ser diseñado hace 12 años. Los primeros dos prototipos fallaron y llenaron de dudas a los fabricantes.
- Es posible utilizar los pozos de petróleo en desuso. Para perfeccionar el tubo se usó el silo de 60 metros de profundidad, hecho para el misil Atlas.
- Un sensor de rayos gamma ayuda a saber qué tipo de capas hay en la zona a perforar.

1 comentario:

  1. hola me llamo fernando y me pregunto,porque chile quiere instalar tubos para la via ferrea y no para producir energia PAIS.ESTAN LLENANDO CON TERMOELECTRICAS

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