lunes, 21 de enero de 2013

Gobernación gestiona permisos ambientales para embotelladora y planta hidroeléctrica en el Silala



La Gobernación de Potosí gestiona ante el Órgano Ejecutivo los permisos ambientales para instalar en los manantiales del Silala una embotelladora de agua y una planta hidroeléctrica, mientras que en febrero concluirán las obras de los seis criaderos de truchas. El objeto es aprovechar parte este recurso que hoy es desviado hacia Chile, se informó.

El secretario general de la Gobernación de Potosí, René Navarro, explicó a La Razón Digital que fue remitido al Ministerio de Medio Ambiente y Agua la documentación necesaria para la emisión de la ficha ambiental tanto para la embotelladora como para la planta.

La Paz y Santiago mantienen un diferendo por el uso de las aguas del Silala, un manantial que nace en Potosí y cuyo curso fue canalizado por el país vecino hace 104 años. Chile afirma que el Silala es un río de curso internacional, aunque en 2008 llegó a un preacuerdo con Bolivia para pagar por el 50% del recurso que hace uso hasta tanto se defina la propiedad del restante porcentaje.

Hay cálculos que establecen que los bolivianos dejan de percibir por lo menos dos millones de dólares al año por el uso del recurso ubicado en Potosí, en la comunidad fronteriza de Quetena Chico.

“Ya hemos enviado los dos proyectos para que nos autoricen las fichas ambientales para la construcción de la embotelladora de agua como la planta hidroeléctrica”, informó Navarro, quien añadió que las obras empezarán una vez concluidos los criaderos a finales de enero o principios de febrero.

El secretario de Desarrollo Agropecuario de la Gobernación de Potosí, Raúl Mendizábal, explicó en noviembre de 2012 que el proyecto de la embotelladora disminuirá entre 30% a 40% el flujo de las aguas de forma permanente. “Chile va a tener que preocuparse porque el Gobernador (Félix Gonzáles) tiene el propósito de que las aguas del Silala se usen al 100%”, señaló ese entonces.

La instalación de la planta hidroeléctrica, que tendrá un costo de más de tres millones de bolivianos, contempla la construcción de obras para producir caídas de agua, el sistema de generación, la subestación de salida, línea de transmisión y la red de baja tensión.

Para las obras civiles está prevista la inversión de Bs 1.829.125 y se destinará Bs 1.368.074 al tendido de la red, además de Bs 327.288 para la capacitación de personal y el equipamiento de la planta, según el proyecto presentado en noviembre por la Gobernación.

“Lo que se pretende hacer con esas obras es poblar la zona de Quetena Chico (lugar donde nacen las aguas del Silala) y generar mayor crianza de camélidos; es todo un plan integral para defender nuestras fronteras con el aprovechamiento de los recursos hídricos”,explicó Navarro.

Las obras de construcción del criadero de truchas tienen un avance del 80%. “Está previsto que las obras estarán concluidas a finales de enero o los primeros días de febrero”. La construcción de las piscinas beneficiará a 600 familias de la región, ubicada a 551 km de La Paz.

No hay comentarios:

Publicar un comentario