Hacer reclamos en Setar es un “viacrucis” para el usuario

Para realizar reclamos en Servicios Eléctricos de Tarija (Setar), por problemas con el servicio, una factura elevada; o realizar trámites para conexiones, reconexiones, cambio de medidor u otros servicios, el usuario tiene que esperar entre 40 minutos y más de una hora, solo para ser atendido.

Un problema es que en la plataforma de atención al cliente,donde trabajan cinco personas, están concentrados diferentes servicios que van de desde las solicitudes de nuevas conexiones hasta los reclamos en la llamada Oficina de Defensa del Consumidor (Odeco), por lo que en algunos momentos del día se aglutinan hasta 40 personas esperando ser atendidas.
Es así que hacer reclamos en Setar se vuelve todo un “viacrucis” por lo lento y engorroso de los trámites, el País eN comprobó esta situación en la que los usuarios tienen que invertir mucho tiempo en horario de trabajo para que luego de horas de espera, reuniones de hasta una hora con los funcionarios de plataforma de atención al cliente y volver varias veces, les digan que su reclamo es “improcedente”.
La declaración de improcedencia, según la norma vigente, abre la posibilidad al reclamante, en una segunda etapa, de proseguir con su requerimiento en otra instancia que es la Autoridad de Fiscalización y Control Social de Electricidad.
Los reclamos más recurrentes son los relacionados a una suba excesiva del consumo y por consiguiente del monto a pagar, el único caso en el que Setar admite el reclamo y reduce el monto a pagar es cuando existe un error de lectura del medidor, en este caso es la microempresa encargada de este trabajo y contratada por Setar, la que tiene una sanción por este error.
En el resto de los casos,los reclamos son improcedentes y el usuario debe pagar la factura. Según señalan algunos usuarios la empresa les dijo que las subas excesivas se debían a diversos factores como un consumo elevado, fugas por conexiones precarias o medidores muy pequeños que cumplieron su vida útil.
Los reclamantes que por lo general son de zonas periféricas de la ciudad o de comunidades aledañas, y no entienden cómo de un mes a otro sus facturan se “inflan”, en algunos casos, en hasta un 200 por ciento más de su consumo habitual.
Los casos son diversos y van desde el incremento de decenas hasta cientos de bolivianos como en la situación de la señora Paulina, de la comunidad de La Pintada, que pagaba 150 bolivianos y en el mes de diciembre tuvo un incremento hasta los 350 bolivianos. Después de realizar la inspección, los técnicos anotaron que la lectura era normal y correlativa, la cantidad de electrodomésticos, la cantidad de personas que viven en la casa y como única observación precisaron que el medidor estaba sin precinto de seguridad, lo cual no influiría en el consumo.
Cuando la señora Paulina se apersonó por segunda vez con la hoja de inspección esperó cerca de 40 minutos para ser atendida y luego de una hora entre un escritorio y otro le dijeron que el exceso se debía a que no se realizó la lectura del medidor en dos ocasiones y se compensaba el consumo, pero ante la persistencia del reclamo, Setar volverá a enviar a técnicos para una nueva revisión, y la reclamante deberá volver.
En declaraciones a Plus Tv, el gerente de Servicios Eléctricos Tarija (Setar), Jorge Cabrera, explicó que no hubo ningún incremento de tarifas y que más bien se presentó un nuevo tarifario que tendrá vigencia de cuatro años, y de ser aprobado, las tarifas de energía eléctrica podrían reducirse.

Setar pidió una carta para brindar información

El País eN intentó conocer una información oficial del problema por el que varios usuarios tuvieron consumos excesivos y si no se debió a una suba de tarifas, ¿cuál era el problema? así como también la cantidad de reclamos que se recibían cada día.
Pero desde gerencia comercial de Setar se negaron a facilitar esta información, indicando que no estaban autorizados para brindar la misma y que se debía enviar una solicitud escrita al gerente general, para que autorice difundir la información.