Después de nueve horas de debate, la Empresa Eléctrica Corani SA acordó ayer indemnizar a más de 35 familias de cinco sindicatos con 3 mil dólares a cada una por el avasallamiento de tierras para la construcción de accesos e instalación de tuberías de la Hidroeléctrica San José.
Según el dirigente del sindicato Miguelito, Eduardo Franco, se hará un registro de terrenos afectados para el pago.
Ayer, los comunarios de los sindicatos Miguelito, Paracti, Bolívar, San José y la central Pampa Tambo mantuvieron una reunión con el gerente general de la Empresa Corani, Carlos Rocabado, para consensuar una solución por el avasallamiento de tierras para la ejecución del proyecto.
La cuantificación de los terrenos se realizó en base a un estudio técnico, lo que también precisa que, además, se pague un monto por árbol derribado. Entre 1,80 y 2 bolivianos es el monto que se pagará por cada pie de árbol maderable que pertenezca a una propiedad privada.
En anteriores declaraciones, Roberto Patzi, uno de los comunarios de la región, contó que sólo en San José más de dos hectáreas de árboles de palta y plantas de achojcha, lacayote y zapallos fueron invadidas para la construcción de tuberías para conductos.
En un recorrido por uno de los caminos de ingreso a los túneles, en Locotal, se evidenció maquinaria pesada trabajando y derribando árboles.
Ayer, se pudo observar ardillas que salían corriendo de entre los árboles hacia la carretera. A ambos lados de la senda abierta para el ingreso de maquinaria pesada hay árboles derribados y vegetación aplastada.
En información proporcionada por ENDE, la Hidroeléctrica San José figura como uno de tres proyectos en ejecución del que no se precisa si cuenta o no con licencias medioambientales.
Por otra parte, el dirigente de la central Pampa Tambo, Francisco Fernández, indicó que la empresa Corani tiene una concesión de 41 hectáreas de terreno que invadieron terreno que pertenece a esa comunidad.
Fernández explicó que acordaron con la empresa una inspección de técnicos del Instituto Nacional de Reforma Agraria (INRA) para que determine cuáles son los límites exactos.
“Todavía no tenemos cuantificado cuántos metros cuadrados son, pero la solución para nosotros es que recorran la malla olímpica, porque son tierras productivas”, indicó.
La central Pampa Tambo aglutina a 15 sindicatos que con la invasión de un metro de terreno en todo el perímetro de la obra se ven seriamente afectados, señaló Fernández.
Además, según el dirigente, no se trata sólo de propiedades privadas productivas avasalladas, sino que también se avasalló propiedad comunal.
Buscan resolver abastecimiento de agua
Para este lunes está prevista una reunión entre representantes de la Gobernación, la Brigada Parlamentaria, la Alcaldía de Colomi y la empresa Corani para darle solución al problema surgido después de que 10 proyectos de riego y conexión de agua potable para 15 comunidades fueron frenados a causa del proyecto hidroeléctrico.
Diez proyectos de riego y agua potable están paralizados por la ley 628 que concede a Corani el uso del agua de las cuencas del río Paracti para la hidroeléctrica San José, que es construida por una empresa china.
En declaraciones anteriores, el alcalde de Colomi, Valentín Inturias pidió que se derogue la normativa, porque no fue consensuada con la población.
La región genera recursos de la agricultura que se centra en la producción de hortalizas y frutas.
La ley cuestionada fue promulgada por el Gobierno en enero pasado y establece que en un perímetro de 432,3 metros cuadrados alrededor de la cuenca del río Paracti los pobladores no pueden usar el agua ni de la cuenca, ni de los afluentes, ni del rebalse de la represa Corani.
Según Francisco Fernández, dirigente de la Central Pampa Tambo que es una de las más afectadas, la ley es inconstitucional, porque va en contra de los derechos humanos de los comunarios. Inturias, por su parte, añadió que no negociarán el uso de las aguas del río Paracti y otros afluentes porque se consideran dueños de esas aguas. Dijo que aceptan no usar las aguas de Corani, pero el resto les es imprescindible para consumo y riego.
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