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lunes, 27 de junio de 2016
Emprendimiento que cambiará el escenario eléctrico del país
Hablar del proyecto múltiple Río Grande-Rositas, para el asesor general de la gobernación de Santa Cruz, José Luis Parada, es tocar un tema de envergadura, que para el departamento es de vital importancia si se quiere lograr una mejor infraestructura en la oferta de electricidad, de agua potable y del sistema de riego.
Parada recordó que el proyecto tendrá un impacto en la seguridad alimentaria, pues se podrá habilitar tierras fértiles, unas 200.000 hectáreas en el Chaco boliviano, en al cuenca baja del Río Grande.
El sistema de riego es otro de los factores que destaca Parada que sumado a la oferta de nuevos puntos de agua potable para Santa Cruz hace de Rositas un proyecto integral que no solo dotará de energía eléctrica al Servicio Interconectado Nacional (SIN).
Para Julio Roda, presidente de la Cámara Agropecuaria del Oriente (CAO), Rositas no solo es electricidad, sino todo un complejo que va a beneficiar a los agricultores, a los ganaderos y a la población en general.
Otro punto a favor de la hidroeléctrica es que con su construcción se puede dar paso a una solución estructural en el control de las inundaciones en áreas cultivadas en la cuenca baja del Río Grande, se podrían proteger unas 800.000 hectáreas.
Sin embargo, no todo es elogio, pues para el Comité Cívico de Vallegrande, la construcción de las siete represas va a significar que se pierda una parte importante de una zona boscosa, que en 1979 mediante un decreto permitió la creación de la reserva de Rio Grande-Masicuri, con una superficie de 242.000 hectá-reas. Para Quiroga ese será una de los mayores daños que contempla el proyecto a no ser que en el informe final de Eptisa se haya encontrado la forma de no inundar esa reserva.
“En las reuniones que tuvimos con el representante de ENDE le pedimos que no de un informe técnico sobre los posibles daños en el medio ambiente, pero no obtuvimos una información detallad”, dijo Quiroga.
Al respecto, Casanovas, indicó que Eptisa solo hará un trabajo en cuanto a la construcción de las represas y que la parte medioambiental estará a cargo de otra empresa. Por lo que se debe esperar los resuldos de esos trabajos para contar con un informe detallado e integral sobre el impacto de la hidroeléctrica Rositas en las provincias de Vallegrande y Cordillera y cuáles son sus beneficios.
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