Chile cuenta con un gran potencial en torno al uso de energías renovables, no sólo en relación con la hidroeléctrica, solar y eólica, sino con respecto a otras fuentes que han sido poco aprovechadas como la mareomotriz y la geotérmica. El año pasado, ese país presentó su política de energías renovables, con el objetivo de que el año 2050 el 70% de su matriz energética esté compuesta por ellas.
Según un artículo publicado por la Cámara Boliviana de Hidrocarburos y Energía (CBHE) en su revista Petróleo&Gas, Chile tiene un índice de radiación solar que oscila entre siete y 7,5 kilovatios hora en un metro cuadrado (kwh/m2) en su zona norte Grande. Ésta puede considerarse la de mayor potencial de generación de energía solar del mundo, comparada con otras zonas como México, cuyo promedio de radiación bordea los cinco kwh/m2, o Alemania, que llega apenas a 3,2 kwh/m2.
Hasta 2008, el vecino país importaba gas argentino. Su mercado energético es principalmente privado, donde cuatro empresas controlan el 90% de la generación y no se mostraron muy favorables a cambiar de matriz hacia fuentes renovables. Empero, existe la apremiante necesidad de generar y consumir energía para acompañar su desarrollo económico.
Más de 20 gigavatios
Según anunció el Ministerio de Energía chileno, el plan apunta a una alta penetración de las tecnologías solar y eólica, con más de 20 gigavatios cada una hasta 2050. Se prevé que el 19% de la demanda eléctrica sea atendida por energía fotovoltaica, el 23% por eólica y el 29% por hidráulica. Se anunciaron en total 182 concesiones para proyectos no convencionales de energía renovable, la mayoría solares.
Instalar energía solar y eólica en Chile, por ejemplo, es más barato que hacerlo con fuentes tradicionales como carbón o combustibles fósiles. Esta conclusión se basa en una investigación de los resultados de un concurso público de energía, convocado por el Gobierno de Chile en octubre de 2015.
Según el Banco Mundial en los últimos cuatro años, los precios de los módulos solares cayeron más de 70% (menos de un dólar por vatio) y el costo unitario de la energía solar (kwh) cayó de 30 centavos de dólar por unidad en 2010, a menos de ocho centavos de dólar por unidad no sólo en Chile, sino también en Brasil, Chile, Emiratos Árabes Unidos, India y otros países.
Las inversiones en Chile para la energía solar suman y siguen. Según un informe de la consultora de energía Systep, para 2015 se esperaba la entrada en operación de 749 megavatios (MW) de nueva capacidad en energía renovable, de los cuales 406,1 MW provendrían de fuente solar. Esto equivale a un tercio del consumo de Bolivia, que es de 1.250 MW.
Cerca de la exportación
La exportación comercial de energía eléctrica desde el norte del país hacia Argentina podría ser dentro de poco una realidad. Se espera que en el corto plazo se materialice la primera exportación comercial de energía eléctrica al país trasandino por medio de la línea de transmisión eléctrica Andes-Salta, de 345 Kw, que conecta el Sistema Interconectado Norte Grande (SING) con el sistema argentino (SADII).
Esto, por las altas temperaturas registradas en Argentina y que han obligado a la racionalización y a solicitar inyecciones por parte de sus vecinos. Si bien se esperaba que la exportación de energía se realizara en diciembre, ésta no se realizó ya que el país trasandino optó por solicitar cerca de 400 MW a Brasil.
La planta solar Carrera Pinto, a cargo de la firma italiana Enel Green Power (EGP), en la región de Atacama (norte), comenzó a generar energía y se conectó esta semana a la red eléctrica chilena, según un comunicado de la multinacional. Conectó los primeros 20 MW del total de la capacidad instalada de 97 que tendrá cuando se complete su construcción.
Las plantas que opera EGP en Chile tienen una capacidad instalada combinada de casi 600 MW, de los cuales 340 MW proceden de instalaciones eólicas, 174 de solares y 92 de hidroeléctricas. Además, la compañía ejecuta proyectos con capacidad de otros 600 MW, y su total llegará a 1.200 MW. Opera los parques eólicos de Talinay Oriente, Valle de los Vientos, Taltal y Talinay Poniente, así como las plantas solares de Diego de Almagro, Lalackama y Chañares.
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